Esta imagen recoge, mejor que muchas, el ambiguo discurso sobre el pecho femenino en Occidente. Su doble función, reproductivo-nutricional por una parte y erótico-sensual, por otra, es responsable de la mayoría de bromas sobre la lactancia materna. En Occidente, desde la segunda mitad del siglo XX, se ha primado el aspecto sensual, en detrimento y censura del nutricional: durante décadas era fácil contemplar pechos femeninos desnudos, pero siempre sin amamantar. Este objeto, regalo de Yasmin Paricio Burtin, lo presentamos también en las secciones Postales y No-lactancia. |